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Los robots pequeños de KUKA inician a los estudiantes en la tecnología más innovadora
Un robot KUKA a disposición de los estudiantes de la Westfälischen Hochschule para cursos de formación. El robot es capaz de repeler las pelotas de forma autónoma. KUKA promueve el proyecto en el marco de KUKA Education.
20 de abril de 2017
Un robot KUKA transmite conocimientos prácticos
«El objetivo de la aplicación de robots es el de introducir esta tecnología innovadora a los estudiantes», dijo el Prof. Dr.-Ing. Markus Rüter, del área de tecnología de control y regulación de la Westfällischen Hochschule en Gelsenkirchen. El robot KUKA tipo KR 6 R700 utilizado para ello repele pelotas lanzadas desde una distancia de aproximadamente 5 metros mediante una barra situada en el brazo del robot. El robot utilizado, el control del robot y el software correspondiente se puso a disposición por parte de KUKA en el marco de KUKA Education, la oferta para colegios y universidades.
Un robot KUKA acerca la tecnología más innovadora a los estudiantes de la WH Gelsenkirchen.
Cálculo exacto de la altura mediante la rejilla fotoeléctrica
En la aplicación se han dispuesto dos rejillas fotoeléctricas una tras otra que registran la velocidad y la altura de la pelota de tenis lanzada. A partir de estas dos medidas, se calcula la velocidad de tiro, la trayectoria de vuelo y la altura de impacto. El cálculo de la información se realiza como «valor analógico». Para ello se dirige una tensión entre 0 y 10 V de la rejilla fotoeléctrica al robot. Cada tensión tiene asignada una determinada altura de impacto. El robot determina así a qué altura debe desplazarse.
Repeler las pelotas lanzadas: Un robot KUKA en la WH Gelsenkirchen.
El robot pequeño KUKA trabaja en los límites
«El robot está sometido a la máxima carga. Finalmente, debe procesar en un intervalo de milisegundos la señal de entrada y proceder con la altura correspondiente», explica el Prof. Rüter, que ya planea ampliar la aplicación a escritorios. Hasta el momento, el robot ha estado evitando pelotas en una dimensión espacial. «En el siguiente paso el robot debería poder desplazarse no solamente en altura, sino también lateralmente», garantizar Rüter. Para entonces, el robot debería ser un apoyo mucho más seguro que algunos porteros de fútbol.
