Robot con sistema de visión en una fabrica de electrodomésticos
En las instalaciones del fabricante de electrodomésticos Miele, un robot KUKA del tipo KR 20 automatiza la producción de motores de accionamiento.
¡Atención, zona videovigilada! Desde que el fabricante de electrodomésticos Miele utiliza un robot con sistema de cámaras, esta frase describe a la perfección la producción de la empresa. El robot KUKA del tipo KR 20 es capaz de percibir su entorno con precisión, lo que le permite reaccionar de forma flexible ante nuevas situaciones y trabajar con mayor autonomía. Es un ejemplo de cómo los sistemas de robot autónomos ofrecen posibilidades de aplicación totalmente innovadoras en la automatización de la producción.
Los robots con cámara ofrecen mucha flexibilidad
Las empresas Heinen Automation GmbH & Co. KG e ID Ingenieure & Dienstleistungen GmbH han colaborado para planificar e implementar el sistema de paletizado en la fábrica de Miele & Cie. KG de Euskirchen, una localidad de Alemania Occidental. Un robot KUKA suministra componentes de la producción asistido por cámaras. Un factor decisivo para Miele fue la flexibilidad de la aplicación de manipulación. El robot tenía que ser capaz de procesar diferentes componentes.
Miele tuvo el deseo expreso de desarrollar una aplicación de manipulación individual que pudiera adaptarse de manera rápida y sencilla a diferentes componentes y procesos de montaje.
KR CYBERTECH revisa los componentes en busca de fallos
En el centro de la instalación hay un robot KUKA KR 20 de la serie KR CYBERTECH. «La tarea del robot consiste en suministrar de manera automatizada los estátores parcialmente ordenados al proceso de montaje», resume Michael Miessen. Los estátores son partes del motor y forman parte del motor de accionamiento de las secadoras domésticas. Lo peculiar: la garra del robot está equipada con una cámara que comprueba la cantidad de componentes que se van a procesar, así como que su posición sea correcta. Esta comprobación es necesaria, ya que los componentes pueden diferir varios centímetros de la norma debido a las sacudidas sufridas durante el transporte. Con ayuda de la cámara, es posible detectar estas diferencias y los estátores pueden cogerse de manera autónoma con la garra del robot, sin ayuda del operario.
Todas las expectativas cumplidas
Después de la comprobación, la garra del robot se mueve hasta situarse sobre el componente y lo coge. A continuación, el KR 20 lo deposita en una estación de giro. El resto del procesamiento se realiza a través de un portal de manipulación que posiciona el estátor en el contenedor. Una vez que todos los contenedores de carga pequeña están vacíos, el robot los apila en la cinta de rodillos de recogida. A continuación, los palés se transportan fuera de la instalación.