Corte por láser: la tecnología
El corte por láser (en inglés "laser cutting") es un procedimiento sin contacto. Se utiliza con frecuencia para los materiales con forma de plancha.
El material se funde por la parte que atraviesa el rayo láser. En algunos procesos, una corriente de gas sopla el material fundido hacia arriba sacándolo del canal de corte. El resultado son unos cortes precisos y limpios.
Corte por láser automatizado
Desde células de robot individuales hasta instalaciones de producción interconectadas de forma automática, pasando por la manipulación flexible de los componentes bajo un cabezal láser estacionario: desarrollamos la solución óptima para sus operaciones de producción. Tampoco tiene que preocuparse por los componentes de automatización individuales, como la fuente de radiación, los sistemas ópticos o los robots.
Corte por láser: las ventajas
El procedimiento de corte térmico sin contacto ofrece las siguientes ventajas:
- Bordes de corte limpios.
- El componente no se deforma.
- Velocidad de proceso rápida gracias al corte por láser 3D espacial.
- Excelente aprovechamiento del material.
Corte por plasma
El corte con plasma es uno de los procedimientos de fundición. Los cortes térmicos son especialmente adecuados para grosores de chapa medios, de uno hasta 100 milímetros.Un arco concentrado funde el material de forma local. El movimiento de avance de la máquina produce un corte. El gas de plasma garantiza que el material blando sea retirado constantemente del canal de corte y separe la pieza.
Corte con oxiacetileno
El corte con oxiacetileno o corte térmico autógeno es uno de los procedimientos de separación térmicos. Esta tecnología está especialmente indicada para los aceros sin aleación o de baja aleación como la fundición de acero. El corte térmico es un procedimiento eficaz para materiales de gran grosor.
En el corte con oxiacetileno, la pieza se calienta primero por la superficie a la temperatura de ignición. A continuación, se añade oxígeno con una pureza mínima del 99,5 %.
Esto oxida la pieza. Además, el oxígeno sopla el metal líquido sacándolo del canal. Entonces se genera calor de combustión. Este calienta de nuevo la capa subyacente a la temperatura de ignición. Así, el proceso autógeno continúa y corta el componente.
El corte con oxiacetileno tiene múltiples aplicaciones: esta tecnología se encuentra allí donde se mecanizan y se procesan metales de gran grosor.